6 personas

45 minutos

HISTORIA DEL PLATO:

Es riquísimo, su sabor agridulce con un toque de jengibre hará una explosión de sabor en tu boca. Es nuestro almuerzo perfecto de domingo en familia.

INGREDIENTES:

• 1 Pechuga de pollo Ariztía
• Sal
• Pimienta, al gusto
• 1/2 taza de harina
• 3 cucharadas de aceite
• 1 cucharada de fécula de maíz
• 1 taza de piña picada
• 1 cucharadita de jengibre
• 3 cucharadas de vinagre
• 1 cucharada de salsa de soya
• 1 cucharada de azúcar
• Semillas de sésamo (opcional)

PREPARACIÓN:

1. Salpimentar el pollo, cortado en cubos y enharinarlo ligeramente.
2. Calentar el aceite en un sartén grande a fuego medio y agregar el pollo. Freír hasta que empiece a dorarse, retirar del sartén y escurrir el exceso de grasa. 3. Reservar.
4. Agregar la fécula de maíz en el sartén y dejar que se dore, luego incorporar la piña, jengibre y salsa de soya. Cocinar un par de minutos, regresar el pollo al sartén y añadir vinagre, azúcar y 2 tazas de agua.
5. Sazonar con sal y pimienta y dejar que la mezcla hierva. Tapar y reducir el fuego a bajo; cocinar hasta que el pollo quede suave, alrededor de 30 minutos
6. Al momento de servir se puede agregar un toque de semillas de sésamo.